sábado, 27 de marzo de 2010

La chica Delirio pregunta...


¿Cuál es la palabra que nombra el momento en que te percatas de que has perdido gran parte de tu tiempo defendiendo una propiedad que sólo era tuya de nombre?

H.

viernes, 26 de marzo de 2010

Inventando el futuro III

Este texto fue un serio candidato a enviar al concurso. Dudé en enviarlo durante tres noches y al final desistí. Me quedé con la sensación de que hubiera ganado algo, pero ps ya ven cómo es este bisne; influyó en mi desición el hecho de que el argumento daba para más cuartillas. Se los paso, igual que los otros, sin arreglos. Enjoy.


Cum hoc, ergo propter hoc (o cómo no se debe crear un mártir)

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Hermana Macehual Citlali Mendoza, militante del Partido Mexicanista Unificado desde 2029. Informe de actividades de politización y aplicación de la teoría de la siembra de mártires.

Primer principio: El cambio es inevitable, ley social. La resistencia voluntaria al cambio es reaccionaria; la sensación de permanencia de ciertos remanentes de la realidad pre-revolucionaria obedece únicamente a la inercia de la sociedad. Algunos de estos elementos son dañinos, otros son útiles al cambio revolucionario. Reconocerlos es deber del militante mexicanista, siempre dispuesto a orientarlos a la instauración de la República de Anáhuac…”

Citlali detuvo el dictado. Redactar un informe siempre había sido tedioso. O sea, conozco los pinches preceptos del Partido, ¡ya me los sé! ¿qué caso tiene repetirlos tanto? Ojalá valga la pena la toma del poder, para que esta chamba la hagan otros. O los robots… Dejó escapar una pequeña risa. Sí, claro: robots, sólo la gente huevona como yo piensa en robots. Buscó con la vista su caja de cigarros, pero la penumbra de su cubículo sólo le permitió tantear con las manos. ¡Órale! Todavía tengo papel y plumas de tinta. A lo mejor las guardé por nostálgica. Encontró los cigarros, sacó uno, lo encendió, disfrutó unas cuantas bocanadas lejos del dictáfono y prosiguió.

“…Quinto principio: El alma mexicana tiende a la jerarquía y el reconocimiento de un tipo definido de singularidad, generalmente derivado de un imaginario machista, pero al mismo tiempo respetuoso de cierto orden matriarcal. Políticamente, sólo puede engendrar líderes y seguidores. Un régimen que obedezca a estas tendencias naturales es el tránsito adecuado para el cambio revolucionario. El engaño a las masas es válido en este contexto…”

Suspiró. Activó la pantalla de televisión. Lo de siempre: la invasión india a Pakistán y un plebiscito hecho en la cada vez más débil Unión Norteamericana arrojaba sus primeros resultados: 70% de los ciudadanos participantes pedían la disolución de la Unión. El cimiento perfecto para el nacimiento de Anáhuac, pero es que también esos pinches aztlanistas…Tomó un sorbo de café y volvió a darle una chupada al cigarro. Hizo un gesto de asco. Seguro que, al menos, en el siglo XX tomaban buen café y fumaban algo mejor que esta mierda. Pero había disfrutado el cigarro. No: el asco no era por eso y tampoco por el café. Continuó.

“…Un buen mexicanista debe estar atento a las oportunidades que el cuadro social ofrece, por lo que la que elabora este informe lamenta dar a conocer la fallida aplicación de la teoría de la siembra de mártires. El sujeto elegido para tal propósito fue seleccionado de entre el círculo más cercano de quien esto redacta. Su nombre: Luis Cuauhtli Mendoza, hermano de la militante. Se le acercó con la debida prudencia al Partido y su ideario, pero manteniéndosele convenientemente alejado de una militancia activa. La cercanía…”


“… la cercanía de la militante con él fue un factor importante para lograrlo. Durante meses se le adoctrinó de tal forma que se pudiera convertir en un seguidor fanático del mexicanismo. El carisma del sujeto y la amplia red de comunicación audiovisual portátil instalada en la Zona Central por el gobierno de la Unión lograron completar con éxito la misión de darlo a conocer entre los habitantes de la misma. Cuando se le habló de acciones drásticas para llamar la atención del pueblo, accedió entusiasmado a aceptar cualquier propuesta.”


“Nota personal: Varias veces me habló del poder simbólico de su propio sacrificio. Me propuso aventarlo de una unidad habitacional de las más nuevas (y altas) envuelto en una antigua bandera federal. Y en otra ocasión, se le ocurrió la estrafalaria idea de pasar montado a caballo en los barrios controlados por los militantes aztlanistas más extremistas y provocarlos a acribillarlo. Era, en verdad, alguien con ganas de morirse.”


“El día de hoy, que se celebra una de las tres fiestas nacionales de la Unión, dio un discurso en el Zócalo de México sobre nuestra plataforma política inmediata. Habló de cómo los sistemas de transporte, tanto de personas como de abastos, habían sido rebasados años atrás; de nacionalismo alimentario, ante problemas como la extinción del nopal; sobre la creciente influencia de la cultura angla en el alma mexicana, cómo lo demuestra la alarmante y galopante adhesión masiva de muchos a iglesias y sectas protestantes y la corrupción del español; también sobre el peligro reaccionario católico y fascista del aztlanismo y de la alianza de éste último con las antiguas familias del narco, hoy convertidos en respetables empresarios y políticos. Al respecto, el Partido debe analizar la posibilidad de una futura guerra, tanto por el agua potable como por problemas fronterizos, contra un Estado aztlanista, pues la adhesión a esta doctrina reaccionaria entre la población de la región separatista del Bajío es de un nivel alarmante. Es imperante que el Partido se apresure a lograr la simpatía de los pueblos indios susceptibles de ser víctimas de las limpias aztlanistas. El punto fue abordado por Lui… por Cuauhtli, aunque en otro tono. Mencionó asimismo el control policíaco e ilegal de la conciencia por parte del actual régimen de la Unión, que se vale de la red audiovisual portátil para ello. Una vez terminado el discurso, la militante y él montarían una farsa que provocara la represión deliberada de quienes escucharan y el sacrificio del sujeto”.

Citlali se mordió el labio inferior. ¿Fallamos por ti? ¿O por mí? Luis, no entiendo. Desde pequeños, tú sabías que era incorrecto…Controló aquel raro sentimiento y siguió dictando.


“Nota personal: La militante debe tener cuidado en seguir al pie de la letra las indicaciones del Partido y no dejarse llevar por… emociones fuera de lugar. La creciente tendencia al juntamiento, es decir, uniones libres y concubinatos, al contario de lo que se creería, alimenta la idea del amor romántico; es decir, relaciones no sancionadas por autoridad alguna. Es preciso evitar que esta idea sea propagada con fines políticos, tanto en la tendencia a entronizarla como dogma de vida como su utilización como arma ideológica contra un futuro régimen mexicanista”.

Sonrió por la ironía de lo que acababa de dictar. E incestuoso, además. Se detuvo una vez más. Sintió lágrimas salir de sus ojos, pero siguió.


“El acto de politización por vía de la siembra de un mártir se vio deformado por circunstancias insospechadas que salieron a flote a último momento. En realidad, los cálculos estaban errados. Alguna organización no identificada ya se había acercado al sujeto o se vio impresionado por alguna extraña filosofía, ya que engañó a la militante durante meses sobre su adoctrinamiento y se entregó al final a un acto de sacrificio ajeno a lo planeado. Rápidamente, tras el discurso se vio alzarse tras de él una cruz de madera, un par de individuos se acercó y asesinando salvajemente a Cuauhtli, le arrancaron el corazón para después crucificarlo. El acto provocó pánico masivo y la consecuente represión. El simbolismo del acto parece evidente, pero para quien esto redacta, permanece oscuro. Se recomienda abstenerse de usar la siembra de mártires como estrategia política en lo sucesivo. Libertad, mexicanidad, comunidad. 5 de mayo 2033. Fin del informe.”


Había sido un día agitado. Citlali se sentía cansada; quizá era el llanto o su desordenada forma de redactar el informe. No fue por amor, ni por la mentada libertad. Te oí, Luis, ¿qué era? Y, ¿por qué sonreías? Fumó un poco más y terminó su dictado:

“Nota personal: Ese hijo de la chingada nunca me quiso…”


P.D.: Quiero compartirles esto. Sé que no tiene nada que ver, pero me gustaría saber su opinión. Por otro lado, el cuento anterior es OBRA PROTEGIDA, espantajos, ni se les ocurra plagiar.


H.

miércoles, 24 de marzo de 2010

En la opinión de...

La Momia de Lenin
H.

sábado, 20 de marzo de 2010

Vichentenario al chile (Pt. 2): Así nos adoctrinan ahora

Va de a rápido. El viernes de la semana pasada fui a visitar el museo itinerante que Televisa, el Gobierno Federal, Slim y sus secuaces pusieron en el Zócalo capitalino para exhibir el trabajo de Willy Sousa. La exposición consiste en fotografía en su mayoría, para rematar con la proyección de un video que parece el trailer de alguna película gringa y cuyo escenario me recordó poderosamente las escenas iniciales de la adaptación cinematográfica de 1984 de Orwell. Vean este video (que es un aproximado del original que se exhibe en el centro) y juzguen.


Coman frutas y verduras.

H.

La chica Delirio pregunta...


¿Qué palabra usas para nombrar la sensación que nace de rechazar sutilmente una autonombrada "Verdad" para después arrepentirse de haberlo hecho?

H.

miércoles, 17 de marzo de 2010

En la opinión de...

La Momia de Lenin
H.

lunes, 15 de marzo de 2010

Vichentenario al chile (Pt. I): De ficciones y otros cuentos chinos

Los festejos del Bicentenario tienen aristas y aspectos que la mayoría del público dejaría de lado si no fuera porque muchos mexicanos, como buenos ciudadanos que son, poseen una televisión en casa. También habrá que agradecerle al creciente uso de internet para conocer los proyectos "culturales" del gobierno (claro, ello se reduce muchas veces a la consulta de horarios y locaciones, sin olvidar que internet sigue siendo un servicio poco democrático en cuanto a la capacidad de gran parte de la población para acceder a él), la propaganda en el metro, paraderos de autobus, boletos, anuncios espectaculares y demás cosas. Conviene que les diga que lo que yo aquí menciono como público está definido como la población, urbana generalmente, que tiene un interés genuino por la celebración cívico-chairo-neoliberal-cool que nuestro amado gobierno ha echado andar, ya sea para criticarla, adorarla y pasar el rato en lo que le toca jugar a la Selección en Sudáfrica.

Claro, no todo lo organiza el gobierno. Hay empresas privadas que han financiado proyectos de alguno que otro loco para presentar su visión particular de lo que significa celebrar "200 años de libertad". Ya en su momento nos ocuparemos de los anuncios donde nos dicen que lo mismo somos gente del SME que un plato de mole, gente comiendo en el panteón o niños que corren en la playa. Este tipo de imágenes explotan un imaginario que todavía, después de varias décadas, no termina de cuajar de manera satisfactoria, y agradecemos a Azatoth que así sea,

Es relativamente conocida la teoría que dice que la población mexicana se educa más fácilmente en los valores cívicos y la identidad nacional por medio de imágenes que por vía de la letra impresa, y digamos que esta teoría tiene gran parte de su sustento en la dinámica histórica del cine. Si tomamos en cuenta que en la segunda mitad de esta década que está muriendo han aparecido determinados proyectos cinematográficos que van por derroteros un tanto inusuales para la industria nacional (animación y un tanto blandengue acercamiento a la ciencia ficción), notamos que, en tiempos de saberes fragmentados -como dirían los posmodernos y demás banda rara- la ideología encuentra buenos fermentos para expresarse. No está por demás decir la llegada de la democracia, la libertad, la buena onda de la diversidad y otros mitos de finales del siglo XX han venido desmintiéndose paulatinamente y tanto los nostálgicos escandalizados de la vieja izquierda como los liberales de pacotilla del 2000 vienen discutiendo el tema desde hace veinte años sin cambiar de página. Lo cual no significo que ello sea malo, simplemente un poco aburrido.

Porque lo que rifa, después de todo, viene siendo la reconciliación, la celebración de lo diferente en planos completamente absurdos. Así nos llegan las películas mexicanas animadas que hacen un buen esfuerzo técnico pero algo pobre en el ámbito de las historias que cuentan. La "versión oficial" de la Historia Nacional (demonio de nuestros tiempos) se maquilla en una de esas producciones y nos presentan a los conocidos héroes de monografía, a lo mucho, como protagonistas de juego de rol. ¿No me creen? Ps véanlo:


Morelos y un personaje corpulento back-to-back rodeados de realistas, al mas puro estilo Army of Two; Josefa Ortiz de Domínguez en una escena con actitud digna de Smallville; un güero inindentificable con una chica de origen étnico incierto en una escena de amor como sacada de Disney; un tipo, suponemos insurgente, sediento de venganza por su pueblo en medio de una lluvia con relámpagos, donde su sola actitud podría contarnos esta historia cliché; y claro, el bonus track: el Niño Artillero rifándose como los grandes en una salida digna de trailer de película de James Cameron.

Digamos que cuando Disney dejó de contar historias de princesas y sacó cosas como Hércules y le apareció la competencia en producciones como El camino a El Dorado, bien podría haber apadrinado esto. La cuestión es que el público se hace muy exigente y mamón y un producto como este no parece tener los ingredientes de lo que los espectadores de Harrys Potters y Avatars apreciarían y por ende pagarían por ver y recomendarían a sus conocidos. Y aún más, lo comentarían en serio. Causa mucha gracia ver cuando el gobierno se pone la camisa de cool y traduce su anquilosado discurso legitimador en propaganda audiovisual de este tipo, e inquietud aquello de que, por ser de tinte conservador (whatever that means) reivindique la gesta de hace 200 años y no la de hace 100 en primer lugar. Sí, sí, el video dice "II", osea "segundo episodio, goeii, no critiques antes de saber si va a haber algo de la Revolución".

Bueno, mis queridos camarradas, lo que sucede es que, en opinión de este infame bloguero, el monopolio simbólico de la Revolucia está en manos de un ente mutante llamado PUEBLO, y los que hablan en su nombre hacen sus propias lecturas de la historia... que en muchas ocasiones vienen siendo refritos y variadas formas de entender la conocida versión que dice que, no importa si naciste en el 84 o en el 76 o en el 92, los españoles TE conquistaron, mataron a TU general Zapata, a TU general Villa, los gringos TE quitaron la mitad de TU territorio, etc, etc. Créanme, esta es la versión vulgar, pero cuando sacamos el común denominador de las "otras historias", las "historias de los de abajo" nos hallamos con cosas muy interesantes que hablan más de los que las escupen y pregonan que de lo tratan. De esas visiones vale la pena rescatar otras valiosas perspectivas, pero eso ya es masa de otro tamal.

En medio de las historias de un pueblo heroico reprimido, donde la sencillez, la individualidad qu expresa el sentir de toda una comunidad (sí, aunque suene contradictorio) e incluso la pobreza son celebradas como expresiones de resistencia, aparecen lecturas ficticias que si bien hacen eco de arquetipos como el del bandolero social*, no aspiran más que a contar una buena historia de aventuras. Así llego, después de darle muchas, muchas vueltas, a esto:



Yo diría: "Qué buen material steampunk tenemos aquí" o en su defecto "qué buen inicio de tendencia steampunk tenemos aquí". Debo confesar que todo lo que tiene que ver con la posibilidad de contar una historia steampunk (ucronía especialmente) ambientada en México me ha entusiasmado mucho últimamente y me veo muy gratamente sorprendido por Espíritus de Furia. Los creadores han declarado que, además de que los comités responsables no han dado su visto bueno para que esta película sea parte de los festejos del Bicentenario, se sospecha de una película que sí recibió tal honor. Chequen la polémica aquí. Así, una obra de aparente sencillez rompe con las tendencias generales sin pretender hacerlo, rompe con un discurso centenario con la intención de entregar una buena ficción al público mexicano. No la adulo más porque ni idea tengo de la consistencia narrativa del guión y estoy hablando más por una idea que me fascina que por lo que ellos están ofreciendo. Y en este caso, no me importarían los subtextos ideológicos involuntarios ni nada parecido.

Creo que no se lo merece, a diferencia de otros. De todas formas, mejor entérense de este filme aquí.

Chale, creo que de hecho pueden voltearme el argumento ¿verdad? ¡Qué meyo! Y entre héroes verdaderos y espíritus de furia (¡ah, qué poético o mamón suena eso!) el Bicentenario nos llega de golpe y porrazo en películas de animación. Las inútiles pero entretenidas polémicas de internet se antojan interesantes en los meses por venir.

*Por cierto, creo que me expresé de forma equivocada: el bandolero social es una figura de análisis histórico desarrollada por el historiador británico Eric Hobsbawm; desconozco las versiones posteriores de otros historiadores y sólo ubico textos que citan la idea de Hobsbawm sin extenderla. La cuestión es que no estoy proponiendo seriamente tratar el bandolero social como un arquetipo, sino más bien ligarlo con esos personajes tan gustados de la literatura, el cine, las series y los comics de aventuras que encarnan héroes solitarios de pasado tortuoso que terminan identificándose con luchas populares, osea "causas nobles". El tema daría para mucho, pero me da hueva ahorita. Ustedes vayan y gánense una galleta de avena desarrollándolo. Para sacar esas buenas ideas de entre cosas banales están Google y Wikipedia.

ONE LOVE, RASTAS


H.

domingo, 14 de marzo de 2010

Delirio lo hace de nuevo....


¿Cuál es la palabra para nombrar la inspiración que abandona a un escritor en el momento justo de robarse la mirada de alguien a quien desprecia profundamente?

Lo prometido es deuda, pues, además de que no cumplimos cabalmente la semana pasada, esta tampoco (estamos publicando en domingo ¡qué vergüenza!). Va la segunda duda, esta extraída nuevamente de Sandman:

¿Cómo se llama la palabra cuando las cosas no son siempre iguales?

Esta duda está resuelta. Lean Sandman y ya verán. Si no es que ya saben qué es.

H.

sábado, 13 de marzo de 2010

Inventando el futuro II

Algunas justificaciones primero: este texto es en realidad el primero que consideré seriamente para enviar al concurso de 2033 y la verdad es que, releyéndolo, creo que me quedó muy mamón. Tiene muchas lagunas y va más por el lado descriptivo que narrativo. Como es evidente, a este tampoco le hice correcciones, así que no esperen gran cosa. Bueno, de hecho a ninguno de los que voy a subir aquí le voy a hacer correcciones, pero para mí nunca está de más señalarlo reiteradamente. Este texto tiene un título, pero la verdad es que no me acabó de convencer y le puse, así, a secas, Ad Nauseam (ni águilas ni serpientes). Va:


Archivo Nacional sobre la Partición (ANP). Fondo Documentos particulares. Colección Cartas. Caja 7: referentes al Acta de Partición (2032-2034) Expediente 2415

Carta de Juan Cuitláhuac Mendoza dirigida a Citlali Irene Rivas del 19 de septiembre de 2033, reproducida en el número 34 (mayo de 2072) de la videorevista “Ollin”, con acuerdo al Artículo 4to, Fracción X de la Ley General de Documentos Históricos de la República de Anáhuac. [CONFIDENCIAL: Posible inspiración de manifiestos subversivos.]

Libertad, hermandad y mexicanidad.

19 de septiembre de 2033

Querida Citlali:

Contesto a tu angustiado mensaje de ayer. La cuestión de mi trabajo no es tan grave, no te preocupes.

Los disturbios de anoche han alertado a la mayoría de los cuerpos policíacos que han patrullado las calles del barrio con una meticulosidad que no había yo visto desde la crisis de la plaga del nopal, allá en el 2021. Se me hace que quitaron los nopales del escudo nacional para acabar ya de plano con el recuerdo de la planta. Claro que a la larga, todo el escudo desapareció porque nadie sabía ya bien a bien quiénes eran las águilas y quiénes las serpientes. O cuál era mejor.

Dicen que antes de la Unión Norteamericana se celebraba el 15 de septiembre; yo apenas lo recuerdo. Hoy me desperté con la noticia de que ya ni el 5 de mayo se celebraría en lo sucesivo. Camino al trabajo me llegaron los rumores de que el Distrito de Querétaro se quiere separar por la inseguridad que provoca la inmigración de gentes de acá del centro, que ya nos habían advertido que la mancha urbana los iba a alcanzar… ¡qué delicados, me cae!. Siendo que hay gente con verdaderos problemas. Junto a mí en el tren bala, por ejemplo, iba junto a un viejito que venía de Tuxpan, huyendo de los aztlanistas, esos que quieren hacer otro país allá en territorio de La Familia. ¿Te imaginas cruzar la frontera en Valle de Bravo o en Guanajuato, cuando hace unos meses teníamos libre tránsito hasta Alaska? El viejito me contaba que la tierra allá en Michoacán ya no vale nada, que los aztlanistas andan decretando mil cosas, y mandando a las mujeres a los “neoconventos” (así les dice un periodista ¿yo qué?). Que la cosa está más grave que aquí y las limpias no se acaban. Parece que el siguiente objetivo, si el Congreso Local de Querétaro queda en manos aztlanistas, son los otomíes. Mejor dile a tu abuela y primos que se pelen, porque las cosas no pintan nada bien. El Tren Bala llega hasta Iztapalapa, pero que no se dejen engañar, por allá también andan bandas haciendo limpias, mejor que se bajen por Azcapotzalco o en Vallejo. Ahí al menos pasan por refugiados de Chiapas.

Uno de mis primos, que se sentía tan ajeno a tanto desmadre, me salió hoy en el trabajo con que mañana se va para Costa Rica porque ya le dio miedo y que además allá los países se están uniendo en vez de separarse. Lo entiendo, le va bien y no quiere perder lo único valioso que le queda: a su familia no les racionan el agua, tienen los mejores páneles solares, sus coches, ya ahora sí, todos son eléctricos. Y mira que ellos todavía tienen ahorros en ameros. No sé cuánto les dure la suerte, porque ese dinero puede esfumarse en cualquier momento, y el camino al sur es peligroso por tierra. Lo que veo es que la verdad él ya no se preocupará por este trabajo.

Cuando pasé frente a una oficina improvisada del PMU [Partido Mexicanista Unificado] estuve pensando muy seriamente unirme porque dicen que aceptan a cualquiera y los más fanáticos son en realidad pocos. Ahí está el futuro, según. No andan tan errados, tanto diputado y jefe de barrio les da una fuerza que no veas y ganan un chingo con la venta de polvo. A los antiguos narcos, los meros meros capos, sin embargo, se los ganaron los aztlanistas y parece que con todo su dinero sí se van a construir su país ese; obvio, le van a llamar Aztlán. Pero ya sabes, nunca he podido decidir nada bueno en mi vida, menos unirme a un partido.

No sé si ya te ha llegado la última: ¡en el último capítulo de Frozen Citizens matan a Abraham! No inventes, está cabrón, todos en el barrio están atentos a ver si sacan otra temporada, pero tanto toque de queda nos corta la luz a la mera hora y ya no se ve la pantalla colectiva, porque déjame decirte que las televisiones particulares ya las prohibieron. A mí me late que son los del PMU, para que no veamos cosas yanquis. Pero pues la Unión ya se está derrumbando, no sé qué tanto le hacen; yo ya ni voy a volver a ver a mis compas del barrio, igual ellos también han de estar huyendo por lo de los disturbios entre mexicanistas y aztlanistas. Y además la policía gringa. Seguro que todos ellos si verán si hay nueva temporada, a diferencia de mí.

A lo mejor el panorama que te pinto no suena así como para que yo esté tan tranquilo esperando la nueva temporada de una serie gringa, siendo que mañana nos pueden dejar sin agua permanentemente o los limpiadores nos confundan con indios y nos maten. Mira, yo ya hace un buen rato me acostumbré a no preocuparme por esas cosas, por mi trabajo. Me pasaron varios libros cuando entré, de esos que llaman distopías, muy comunes el siglo pasado, en los que los escritores más paranoicos les daba por sacar sus fobias. Había uno donde la gente se quedaba estéril, otro donde se quemaban libros y otro donde la población crecía tanto que ya se hacía comida hecha con gente. Tanta lectura de esas me hace ver que, de todas formas uno puede esperar lo peor, aunque no sé qué manías tenían con lo artificial, si lo que nos está pasando, que ellos imaginaron tan trágico, es tan natural, ¿no? Mi trabajo tiene que ver con estudiar esos libros, con entenderlos y evitar sus presagios. De hecho, mi compañero más cercano me dijo hoy que ya nos tocaba hacer nuestra parte. Que todos están listos ya.

Bueno, debo terminar con algo que quería decirte. Primero, no te apures, fui catalogado como estéril hace años y estoy sano; no tendrás un hijo mío ni tienes ninguna enfermedad. Segundo, acabo de encontrar un documento que cambió mi vida. No es una Biblia, si es lo que estás pensando, ahora que ya tanta gente se ha vuelto protestante. No te puedo decir mucho, sólo que tiene que ver con mi trabajo; deberías leerlo tú misma. Si lo haces, seguramente sabrás que lo que estoy a punto de decirte no es tan descabellado. Ya preparé mis explosivos, mañana voy a volar un camión de limpiadores y mi compa un convoy de alimentos que va para Monterrey. Otros más se preparan para volar las oficinas del PMU y los puestos aztlanistas. Claro que eso no se compara con la enorme labor que alguien más se va a echar coordinando los atentados con gas en las cárceles superpobladas y las casas de los narcos. Es probable que no sobrevivamos. Todo mundo nos abandonó. No nos queda nada más que un último acto útil a la humanidad, con una buena sacudida y una escandalosa llamada de atención. Ya nada, ni águilas ni serpientes. Me repitieron hasta la náusea que yo era mexicano; ya ni sé qué es eso, por eso mañana voy a volar en mil pedazos y me llevaré a esos gandallas conmigo. Creo que ya nadie se considera mexicano, supongo que sin mí se habrán acabado, ¿no?

Perdona mi letra, es que bueno, hace ya varios años que nadie enseña a escribir a mano en las escuelas y yo fui de las generaciones que nos llaman “sin lápices”; debo agradecer que aún no hallan desaparecido el papel y las plumas de tinta, aunque la verdad, según me cuenta mi abuelo, nunca se han dejado de vender. Nomás que ahora son objetos quesque para nostálgicos. Chale, ya me duele la mano, esto es más cansado de lo que pensé. Lo único bueno es que sé que las cartas de papel ya ni les importan, menos se les va a ocurrir interceptarlas. Me reconforta saber que al menos estas palabras sólo serán tuyas y mías.

Tuyo siempre, Juan.


Disfrútenlo con leche.

H.

miércoles, 10 de marzo de 2010

En la opinión de...

La Momia de Lenin

H.

lunes, 8 de marzo de 2010

Post Jocoserio pt. IV

A riesgo de que el furioso Anónimo que desapareció de este blog hace ya casi un año regrese para ponerse el ridículo de nuevo, pretendiendo que hacerme quedar a mí en ridículo (cosa por demás absurda: yo ya me ocupo de eso desde que Éter Verde comenzó) e intentando eso criticando el hecho de que yo mencione donde laboro actualmente, como sucedió la vez que les conté sobre mi trabajo en el Archivo Histórico del DF, daré el contexto de la siguiente frase que fue hallada en la puerta de un baño, que al fin y al cabo es la finalidad de los posts jocoserios.

Resulta, jóvenes, que la UNAM requiere que yo haga servicio social. Osea que me puse a buscar dónde hacerlo y tras una serie de azarosos eventos, el Banco de México me aceptó en sus filas un rato. Pero lo que aquí importa es que por primera vez en la historia de la galaxia, los mortales (contribuyentes no cumplidos) como ustedes conocerán un aspecto hasta ahora no revelado de la vida en el interior del edificio que hace esquina en 5 de Mayo y el Eje Central en el siempre alegre y cochambroso centro histérico de la capital mexica (si no se ubican, busquen esas calles en Google Maps, esforzados compañeros de otras latitudes) y los posts jocoserios saldrán de los baños de la UNAM.

Dado que todos en algún momento de nuestra vida nos ha tocado cavilar sobre las posibilidades de la aplicación de la teoría del caos en la antropología urbana y nos preguntamos hasta dónde llegarían nuestras uñas si las dejamos crecer indefinidamente, sentados en un retrete, no habrá necesidad de describirles, queridos compañeros, el estado contemplativo en que yo me encontraba cuando descubrí que el personal de limpieza del Banco de México no puede hacer nada con los mensajes en las puertas de los gabinetes del baño cuando están no escritos, sino grabados.

Antes de transcribirles el interesante texto que me hallé ahí, conviene aclarar que cualquier intento por quitarlo de la puerta donde se encuentra parece no haber tenido éxito y que también se ha dejado ahí durante un largo período, por lo que su antiguedad es incierta. Por otra parte, el contenido y forma del discurso -por mencionar dos aspectos reconocibles por el público no especializado- dista de alguna manera de los que aquí hemos presentando en los anteriores posts jocoserios: en primer lugar, ambos contextos pueden ser un buen factor explicativo, mientras que la originalidad es algo que no me atrevo a evaluar, pues no em considero asiduo de los ambientes donde podría surgir una expresión así. Bueno, posiblemente sí sea asiduo a esos ambientes, pero ni tinta me he dado de algún enunciado parecido.


Transcribo:


"Aquí no es cantina, pero salen pedos"



El público lector puede avisar a este bloguero, que ahora mismo se confiesa ignorante de esa frase hasta este momento de su vida, si dicho texto es una expresión de uso común.


Y como es probable que muchos de ustedes crean que algo está mal conmigo, clávense más en mi supuesta decandencia admirando a mi nada útil afición a contemplar las imágenes de estos vulgarmente llamados "amores platónicos":
Mia Matsumiya, de Kayo Dot
Ximena Sariñana, conocida (y odiada y/o despreciada) por todos (o algunos de) ustedes

Y ya. Si alguien propone votación entre ellas, mejor fíjese bien, porque de entrada aquí no hacemos eso (políticas de la compañía) y además YA TENEMOS UNA ENCUESTA en curso.


Ah! por cierto, Delirio no quiso mandar su duda el sábado pasado. Les repondremos el próximo, ya verán.


Cambio y fuera

H.



miércoles, 3 de marzo de 2010

En la opinión de...

La Momia de Lenin
A lo que el camarrada se refiere es a esto: "En 1809, los 66 pasajeros y la tripulación del barco The Boyd fueron muertos y comidos por maoríes en la península de Whangaroa, en la isla Norte. Esto fue un utu (venganza) por el azotamiento con látigo de un Maorí que rehusó trabajar en el barco durante el viaje desde Australia. El hecho permance como la mayor matanza en la historia de Nueva Zelanda". Amplíen sus conocimientos de este lindo episodio aquí.

Aclaración: no es que creamos que la selección de Nueva Zelanda tiene entre sus filas maoríes que aún reproducen rituales caníbales. Ni mucho menos, que tan valioso pueblo (no es sarcasmo) pueda ser reducido en el imaginario a la práctica de la antropofagia. En serio espero poder poder visitar algún día las islas neozelandesas y admirar "de cerca" la cultura maorí. Y por supuesto, visitar el pueblo con el nombre más largo del mundo. Pero volviendo al tema, sí, en Éter Verde esperamos sinceramente que esos once idiotas pierdan el partido contra la nación de las dos islas, como mínimo.

Y para mostrar nuestra solidaridad con el camarrada, izaremos la bandera maorí:


(No es que seamos insensibles a lo que acaba de suceder en Chile, al contrario. Pero voces más sensatas han dicho y dirán lo pertinente -o impertinente- al respecto. Desde el Valle del Anáhuac, un abrazo solidario a la Araucania)

H
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