Mostrando entradas con la etiqueta XMAS. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta XMAS. Mostrar todas las entradas

jueves, 22 de diciembre de 2011

Feliz lo que sea

En dos días llegarán a su cumbre los ánimos festivos que imperan en estas fechas, ya de por sí saturadas de créditos rebasados y gastadero sin control, sin mencionar, claro, todos los accidentados por ir pedos manejando, los encerrados en El Torito y los ajustes de cuentas
emocionales. Pero en Éter Verde sabemos que no todo en esta temp
orada son problemas con la ley y complicaciones cardiacas, también hay cuestionamientos razonados sobre la naturaleza opresiva del discurso religioso que sustenta la festividad decembrina.

Por eso, decidí desafiar la inexorable marcha del racionalismo antinavideño declarando que en mi casa sí ponemos nacimiento. Así soy de rebelde.

Pero no cualquier nacimiento. No, este está hackeado y trae mensaje oculto.


Chequen la perfección de su composición, su narrativa y coherencia interna, el sutil detalle postcristiano de sus estructura espiral, que culmina el recorrido de los pastores que a Belén corren presurosos y de tanto correr traen los zapatos rotos en un pozo custodiado por César Bono.

Conozcan a dos de sus protagonistas de cerca.


César Bono, guardián del pozo-ombligo-del-mundo

Un gordito smpático que trae un metate en la espalda y que es un perfecto candidato a piratear la idea de Amélie de enviar una figura humana a recorrer el mundo y enviar postales sin explicación alguna.

Si no están felices, puedo regalarles un pedacito de cielo que sobró de la elaboración de mi nacimiento.

Por cierto, de aquí a enero no habrá ni Camarrada Lenin ni dudas de Delirio. Eso no significa que vayamos a tomarnos unas vacaciones. O tal vez sí. Si quieren saber, manténganse al pendiente de este, su blog amigo, que les desea buena salud y mucho bacalao.

H.

jueves, 25 de diciembre de 2008

Ritual

La multitud vive feliz de construir maquetas, montar réplicas artificiales, inundarse de espíritu etílico, rendirle culto al viejo de rojo, al niño de porcelana y yeso y al todo poderoso guajolote. Vive feliz de prolongar la noche, aunque sabemos que la noche acaba, inexorablemente.

Y a la mañana siguiente, recalentados y visitas. Conversaciones, como la de hace un año.

"Un paso en la oscuridad, toco su mano sólo para ver si está sola otra vez".

La espera termina y los retoños buscan ansiosos debajo del ídolo. Hay dolores de cabeza y jaquecas. Algunas cuentas pendientes y mucha pasta. La gran ola ha ido creciendo durante varias lunas y se dejará caer sobre la multitud, sobre mí, sobre tí. Pero no hoy. Porque hoy la noche se prolonga, nos hace libres, nos permite elevar la nariz y oler la madrugada, sentir el frío en la punta de los dedos y despertar como si de un triste juego de cerrar y abrir los ojos se tratara solamente.

"No puedo negarla; haría lo que fuera por detener el sangrado que tiñe su mundo de rojo".

Sí, ya sé, este día nada más es un apéndice, una ocasión cualquiera que cualquiera de nosotros hace especial. Qué rara suena la palabra especial en un día como este. La multitud no sabe que algunos en su seno esperan otras fechas, pero los arrastra a todos con singular alegría, con bondad y firmeza. Nadie la detiene, es una fuerza imparable; hombrres y mujeres, todos son iguales, todos tienen el mismo derecho a ser felices y a disfrutar, sobre todo frente a un copa de sidra y una ración de ichthys salado.

Las lágrimas corrieron y se secaron; hora de volver al mundo real, sea lo que sea que eso signifique.

"Me puedo romper en mil pedazos; corre lejos, muy lejos de mí".

Amen.